Aciduria glutárica tipo I Profs: Verónica Cornejo, Erna Raimann INTA, Universidad de Chile Introducción
Se debe al déficit de la enzima glutaril-CoA deshidrogenasa (OMIM 231670), que produce
una alteración en el metabolismo de los aminoácidos lisina, hidroxilisina y triptofano
(Figura 6). Esta es una enzima intramitocondrial que requiere dinucleótidos de adenina y
flavina, y cataliza tanto la deshidrogenación de glutaril-CoA como la decarboxilación de
glutaconil-CoA a crotonil-CoA. Se acumula glutaril-CoA, que en parte es esterificado a
carnitina produciendo déficit secundario de carnitina. Los pacientes también tienen un
aumento de ácidos dicarboxílicos, ácido 2-oxoglutárico y succínico en la orina, lo que
traduce el trastorno en la función mitocondrial y la oxidación de ácidos grasos.
Probablemente el déficit secundario de carnitina es un factor causal importante en la crisis
metabólica. No se ha encontrado una correlación entre la excreción de ácido glutárico,
actividad enzimática residual y fenotipo. El gen ha sido clonado en el cromosoma 19p13.2
y la mutación R227P en homocigosis provoca déficit total de la glutaril-CoA deshidrogenasa, sin embargo en estos pacientes se ha descrito un grupo que excreta sólo
muy bajas cantidades de ácido glutárico (1).
El mecanismo de destrucción de estructuras cerebrales específicas relacionadas con la edad
ha sido motivo de intensos debates. Hay evidencia de una secuencia excitotóxica. Tanto el
ácido glutárico como 3-hidroxiglutárico exhiben similitudes estructurales con el
aminoácido excitotóxico glutamato. El estudio postmortem de ganglios basales de pacientes
han revelado una vacuolización similar al daño mediado por glutamato. Hoy en día hay
evidencia que este daño neuronal ocurre vía el receptor N-metil-D-aspartato (NMDA)
subtipo 2B cuya expresión dinámica espacio-temporal concuerda con los eventos
neuropatológicos y el curso de la enfermedad. Se puede anticipar durante la crisis
encefalopática una activación masiva de las neuronas glutaminérgicas desde la corteza al
putamen pasando por el núcleo caudado. La acción inhibitoria del tálamo explicaría la
masiva hipotonía muscular y la mejoría temporal de la distonía durante eventuales nuevos
episodios catabólicos como consecuencia de la estimulación de las restantes neuronas
glutaminérgicas. Recientemente se ha estudiado ratas exponiéndolas a altas concentraciones
de ácido glutárico, encontrando un desbalance entre las defensas antioxidantes y el daño
oxidativo especialmente en cerebro medio, hígado y eritrocitos. Esto hace pensar que el
stress oxidativo puede estar involucrado en la toxicidad del ácido glutárico especialmente
Se caracteriza por ocurrir en muchas oportunidades en pacientes con macrocefalia de
aparición neonatal. El estudio con neuroimágenes en ese momento revela atrofia
frontotemporal y retardo en la mielinización. En la etapa presintomática se pueden
encontrar también colecciones subdurales crónicas y hematomas. La macrocefalia aumenta
en los primeros 3-6 meses de vida, alcanzando a esta edad su máximo. Un gran número de
pacientes presenta hipotonía leve que se exacerba durante los cuadros infecciosos junto a
irritabilidad y dificultad para alimentarse. Estos síntomas, sin embargo, son reversibles. En
promedio, el 75% de los pacientes a los 14 meses de edad sufre una crisis encefalopática
aguda asociada a infecciones respiratorias o gastrointestinales o al ayuno previo a cirugía.
Después de esta crisis los niños presentan pérdida aguda de funciones neurológicas
motoras, pero parecen alerta aunque con una grave hipotonía axial con brazos y piernas
tiesas y con movimientos atetoideos de manos y pies y pueden presentar convulsiones.
Generalmente no presentan alteraciones metabólicas. Después de la recuperación los
pacientes quedan con un desarrollo equivalente a 1 ó 2 meses y desarrollan un síndrome
distónico disquinético con relativa preservación de las funciones intelectuales en un niño
que se ve alerta. Además presentan una frente prominente. Posteriormente aparece atrofia
cerebral difusa en concordancia con un síndrome piramidal y retardo mental. La historia
natural de la aciduria glutárica tipo 1 puede ser muy variable, incluso dentro de una misma
familia. El 25% de los pacientes presenta retardo del desarrollo psicomotor y
progresivamente se desencadena una parálisis cerebral distónica. Incluso hay adultos que
nunca desarrollaron síntomas neurológicos (3).
Desde el inicio de la pesquisa neonatal ampliada, son muchos los niños diagnosticados
antes de la crisis, demostrándose que el tratamiento nutricional es muy útil (4 ).
El diagnóstico se realiza midiendo ácidos orgánicos urinarios, detectándose aumento del
ácido 3-hidroxiglutárico. También se puede medir glutarilcarnitina (C5DC) por
espectrometría de masa en tandem. Sin embargo con mayor frecuencia se ha diagnosticado
a personas con déficit de glutaril-CoA deshidrogenasa y un cuadro clínico característico
pero sin aumento de ácido glutárico ni de glutarilcarnitina. En cambio hay personas que
presentan aumento de la excreción de ácido glutárico cuando se altera la función
mitocondrial. A veces se requiere repetir la determinación de ácidos orgánicos para llegar al
diagnóstico. Otra determinación que apoya el diagnóstico es el déficit de carnitina
plasmática con aumento patológico de acilcarnitinas respecto de carnitina libre.
La confirmación del diagnóstico se realiza midiendo la actividad enzimática de glutaril-CoA deshidrogenasa en cultivo de fibroblastos, en leucocitos, amniocitos o en vellosidades
coriales y mediante el análisis de mutaciones (5).
Tratamiento
El propósito de la terapia es prevenir crisis encefalopáticas y el deterioro neurológico que
éstas ocasionan. El diagnóstico pre sintomático es fundamental para lograr este objetivo, ya
que se ha descrito que el 90% de los pacientes queda con daño neurológico severo en la
Es importante señalar que el diagnóstico precoz y un tratamiento rutinario, no proteje
contra las crisis encefalopáticas, por ello se recomienda en períodos agudos revertir estado
catabólico administrando alto aporte de calorías (suero glucosado al 15% y lípidos al 20%),
suspender las proteínas naturales para reducir la producción de los ácidos orgánicos,
mantener fórmulas sin lisina, proporcionar L-carnitina (100-200 mg/kg/día en 4 dosis),
para detoxificar ácido glutárico, hidratar y mantener un balance hídrico y pH dentro de
La terapia a largo plazo puede ser una dieta restringida en lisina (Tabla 1) o en proteínas
naturales (1,0-1,5 g/kg/día), ambas reducen la cantidad de ácido glutárico y 3-OH-glutárico.
La restricción de lisina, requiere de la suplementación con fórmuals libres de lisina, en
cambio la otra, sólo la restricción de proteínas. No obstante se ha visto que los pacientes
con restricción de lisina tiene menos descompensaciones encefalopaticas (6).
La suplementación con L-carnitina 100-200 mg/kg/día previene una deficiencia secundaria
y asegurar estabilidad metabólica en la mitocondria, ya que se forma el complejo no tóxico
glutarilcarnitina, se debe mantener el nivel en sangre de carnitina libre sobre 30 uM/L. La
riboflavina es cofactor de la enzima deficitaria, pero no existe evidencia científica sobre su
efecto beneficioso, no obstante se recomienda la suplementación con 100 mg/kg/día, la que
puede ser suspendida si no hay variación en la excreción de ácido glutárico.
La lisina debe mantenerse en valores entre 45-90 uM/L, cuando es indetectable,
incrementar su aporte en un 25% (usar proteínas de alto valor biológico) y se debe evaluar
el nivel después de 3 a 5 días. Si está bajo 45 uM/L, se sugiere aumentar la ingesta en un
5% a un 10% o por el contrario están sobre el límite superior de normalidad se reducirá su
Las calorías, minerales y vitaminas se establecen de acuerdo a las recomendaciones (Tabla
Diversos fármacos son usados para aminorar las alteraciones neurológicas, pero ninguno de
ellos es recomendado universalmente. El baclofen (1-2 mg/kg/día) trata la espasticidad y el
diazepan, clonazepan, drogas anticolinérgicas, toxina botulínica (BT-A), son usadas para
tratar la distonía. Se han utilizado drogas anticonvulsivantes como ácido valproico, vigabatrin, carbamazepina, pero sin efecto. No hubo mejoría en el síndrome extrapiramidal
En niños con daño neurológico con problemas de deglución, es aconsejable la
gastrostomía, ya que esto ayudará a prevenir deficiencias secundarias y favorecerá la
Durante el seguimiento el ácido glutárico debe permanecer inferior a 25 ng/ml/mol de
creatinina (7), evaluar aminoácidos especialmente triptofano, ácido glutárico en orina y
carnitina libre y total. Cada 6 meses medir ácidos orgánicos para conocer valores de ácido
glutárico y 3-hidroxiglutárico. La medición de acilcarnitinas (C5DC), no es útil para el
seguimiento, ya que la suplementación con L-carnitina lo aumenta.
1 CHRISTENSEN A., et al. “Compound heterozygosity in the glutaryl-CoA dehydrogenase
gene with R227P mutation in one allele is associated with no or very lowfree glutarate
excretion”, en Journal of Inherited Metabolic Disease, 20, 1997, 383-386.
2 LATINI A, FERREIRA GC, SCUSSIATO K, SCHUCK PF, SOLANO AF, DUTRA-
FILHO CS, VARGAS CR, WAJNER M. “Induction of oxidative stress by chronic and
acute glutaric acid administration to rats.” en Cell and Molecular Neurobiology, 2007,
3 GITIAUX, C., ROZE, E., KINUGAWA, K, et als. “Spectrum of movement disorders
associated with glutaric aciduria type 1: a study of 16 patients”, en Movement Disorders,
4 BIJARNIA, S., CARPENTER, K., CHRISTODOULOU, J., ELLAWAY, C., WILKEN,
B. “Glutaric aciduria type I: outcome following detedtion by newborn screening”, en
Journal of Inherited Metabolic Disease, 2008;31:503-507.
5 BARIC, I., WAGNER, L., FEYH, P., et al., “Sensitivity and specificity of free and total
glutaric and 3-hydrixyglutaric acids measurements by stable isotope dilution assays for the
diagnosis of glutaric aciduria type 1”, en Journal of Inherited Metabolic Disease, 1999, 22,
6 KÖLKER S, CHRISTENSEN E, LEONARD JV, GREENBERG CR, BURLINA AB,
BURLINA AP, DIXON M, DURAN M, GOODMAN SI, KOELLER DM, MÜLLER E,
NAUGHTEN ER, NEUMAIER-PROBST E, OKUN JG, KYLLERMAN M, SURTEES
RA, WILCKEN B, HOFFMANN GF, BURGARD P “Guideline for the diagnosis and
management of glutaryl-CoA dehydrogenase deficiency (glutaric aciduria type I).” en
Journalof Inherited Metabolic Disease, 2007, 30(1). 5-22
7 ACOSTA, P., YANNICELLI, S., “Glutaric aciduria type I or α-ketoadipic aciduria”,
Protocolo 9. En Nutrition support protocols, 4th edición, editores Acosta P, Yannicelli S,
Editorial Abbott Laboratories, Ohio, USA, 2001, 166-195.
Recomendaciones de nutrientes en aciduria glutárica tipo I
Area culturale e promozione del Territorio Comune di Bomporto Tel. 059 800722; fax 059 818033 DETERMINAZIONE N. 351 del 29.12.2012 OGGETTO: PROMOZIONE LETTURA ANNO 2012. PROVVEDIMENTI. IL RESPONSABILE DELL’AREA CULTURALE E PROMOZIONE DEL TERRITORIO - il D. Lgs. 18 agosto 2000, n. 267, e in particolare gli art. 107 e 109, relativi alle competenze dei dirigenti e, in asse
Viele Fragen – kompetente Antworten“ Eine Kurzzusammenfassung der höchst informativen Veranstaltung im Frühjahr: Im geschützten Rahmen, in guter Atmosphäre, konnten alle Fragen, die uns auf dem Herzen lagen, ohne Scheu auch gestellt werden. Über 80 Frauen machten davon regen Gebrauch. Wir möchten in Zukunft einmal jährlich einen Informationsabend in dieser Form für unsere Mitg