Theoria, Vol. 17 (2): 27-45, 2008 GENOTOXICIDAD Y CITOTOXIDAD DE PESTICIDAS. EVALUACIÓN DE LOS PRINCIPIOS ACTIVOS Y FORMULACIONES COMERCIALES USADAS EN ARGENTINA
GENOTOXICITY AND CYTOTOXICITY OF PESTICIDES. EVALUATION
OF THE ACTIVE INGREDIENTS AND COMMERCIAL FORMULATIONS
NORMA VIVIANA GONZÁLEZ*, GABRIELA MOLINARI*, SONIA SOLONESKI, MARCELO L. LARRAMENDY
Cátedra de Citología, Facultad de Ciencias Naturales y Museo de La Plata,
Universidad Nacional de La Plata, La Plata, Argentina
Autor para correspondencia: Dr. Marcelo L. Larramendy, Cátedra de Citología, Facultad de Ciencias Naturales y Museo
de La Plata, Calle 64 Nro. 3, 1900 La Plata, Argentina, fax (+54) 221 425 8252, email: [email protected]
En el presente trabajo de revisión hemos descrito en forma general los antecedentes históricos de los pestici-das y el uso mundial de los mismos. Además, evaluamos comparativamente los efectos genotóxicos y citotóxicosde principios activos y formulaciones comerciales de pesticidas masivamente utilizados en Argentina en célu-las de mamíferos in vitro. Entre los mismos, hemos seleccionado al herbicida Dicamba y su formulacióncomercial Banvel® (52% Dicamba) y al endectócido Ivermectina y su formulación Ivomec® (1% Ivermectina). La genotoxicidad y citotoxicidad de los compuestos fue cuantificada mediante el empleo de diversos bioensayostales como frecuencia de intercambios de cromátidas hermanas, ensayo cometa, análisis de la progresión delciclo celular, índice de replicación proliferativa y ensayos de rojo neutro y MTT en linfocitos humanos y líneascelulares establecidas de roedores. Los resultados obtenidos pusieron en evidencia que el daño inducido por elBanvel® fue marcadamente superior que el ocasionado por Dicamba, demostrando la existencia de xenobióticospresentes en el excipiente con una capacidad tóxica aditiva sobre el principio activo. Opuestamente, dichoefecto no fue observado en la formulación comercial de la Ivermectina, Ivomec®. Estos resultados ponen demanifiesto que: 1) Resulta insuficiente en estudios de biomonitoreo conocer solamente los efectos tóxicos de losprincipios activos de un pesticida; 2) Los efectos tóxicos del los pesticidas deben ser evaluados y determinados ensus formulaciones comerciales disponibles en el mercado; 3) Los efectos deletéreos del/los excipiente/s presente/s en la/s formulaciones comerciales no deben ser descartados ni subestimados; 4) Un único ensayo de genotoxi-cidad/citotoxicidad es insuficiente para caracterizar la toxicidad de un pesticida en estudio. Palabras clave: Pesticidas, formulaciones comerciales, dicamba, ivermectina, citotoxicidad, genotoxicidad. ABSTRACT
In this review we summarized a general background of the history and the use of the pesticides worldwide. Furthermore, we evaluated comparatively the genotoxic and cytotoxic effects exerted in mammalian cells invitro by several pure pesticides and their technical formulations commonly used in Argentina. Among them,the herbicide Dicamba and Banvel® (52% Dicamba) and the endectocide Ivermectin and Ivomec® (1%Ivermectin) are included. The sister chromatid exchange frequency, comet assay, cell-cycle progression analy-sis, proliferative replication index, MTT and neutral red assays were used as end-points for measuring geno-toxicity and cytotoxicity in several cell systems including human lymphocytes and rodent cell lines. The
Theoria, Vol. 17 (2): 2008
results clearly demonstrated that the damage induced by the commercial formulation Banvel® are in generalgreater than those produced by the pure pesticide Dicamba, demonstrating the presence of deleterious com-ponents in the excipients with a toxic additive effect over the pure chemicals. Finally, no such an effect wasdetected for the excipients present in the formulation of the Ivermectin. Accordingly, these observationshighlight that: 1) A complete knowledge of the toxic effect/s of the active ingredient is not enough in biomoni-toring studies; 2) Pesticide/s toxic effect/s should be evaluated according to the commercial formulationavailable in market; 3) The deleterious effect/s of the excipient/s present within the commercial formulationshould not be either discarded nor underestimated, and 4) A single bioassay is not enough to characterize thetoxicity of a pesticide under study. Keywords: Pesticides, commercial formulations, dicamba, ivermectin, cytotoxicity, genotoxicity.
Recibido: 03.06.08. Revisado: 23.07.08. Aceptado: 16.12.08. ANTECEDENTES GENERALES
bido muchos de los plaguicidas antiguosdebido a sus impactos negativos sobre los
Un factor decisivo de la Revolución Verde
ecosistemas y/o efectos tóxicos potenciales
ha sido el desarrollo y aplicación de plagui-
organismos perjudiciales para los cultivos
tóxicas, mutagénicas y carcinogénicas en
que, de lo contrario, disminuirían el volu-
muchos de los más utilizados (IARC, 1976,
men y calidad de la producción alimentaria.
En lugares donde se practica el monoculti-
vo intensivo, los plaguicidas constituyen el
décadas, tanto los conceptos de plaguicidas
método habitual de lucha contra las plagas.
Por desgracia, los beneficios aportados por
categoría de sustancias han ido evolucionan-
la química han ido acompañados de una se-
do para lograr una definición más precisa
rie de perjuicios, algunos de ellos tan graves
de los mismos al igual que el concepto de
que ahora representan una amenaza para la
organismo plaga. Otro aspecto a destacar es
supervivencia a largo plazo de importantes
que todos los seres vivos, sean éstos organis-
ecosistemas. Además, los plaguicidas pueden
mos plaga así como aquellos organismos no
blanco de los plaguicidas –ya sea por expo-
organismos a quienes no están destinados
sición accidental, laboral o por consumo–,
ya que, simultáneamente con el aumento de
están directa o indirectamente expuestos no
su uso, crecieron muy significativamente los
sólo a los principios activos de los plaguici-
accidentes y enfermedades asociadas a éstos.
das sino a sus formulaciones comerciales.
Estas formulaciones comerciales son mezclas
de un principio activo con actividad tóxica
intoxican dos millones de personas por ex-
y un excipiente teóricamente inerte desde el
posición directa o indirecta a plaguicidas
punto de vista biológico. Sin embargo, nu-
(http://www.who.int/en/). De ese total, las
merosos estudios realizados tanto in vitro
3/4 partes de los afectados pertenecen a los
como in vivo han demostrado que, en la
países subdesarrollados, donde se utiliza el
mayoría de los casos, los riesgos potenciales
25% de la producción mundial de los mis-
a los que los seres vivos se ven sometidos
por exposición a formulaciones comerciales
temente, los países desarrollados han prohi-
es, en muchos casos, más perjudicial que el
Genotoxicidad y citotoxidad de pesticidas. Evaluación de los principios activos. / N. V. GONZÁLEZ ET AL.
en inglés). La misma establece que son con-
siderados plaguicidas: 1) “cualquier sustan-
cia o mezcla de sustancias destinados para
prevenir, destruir, repeler o mitigar cualquier
sobre el efecto deletéreo inducido por for-
plaga”; 2) “cualquier sustancia o mezcla de
mulaciones comerciales en relación a su prin-
sustancias destinados a ser empleadas como
cipio activo de algunos plaguicidas emplea-
reguladoras de plantas, defoliantes o dise-
dos masivamente en el sector agropecuario
cantes” y, 3) “cualquier estabilizante del ni-
de la República Argentina. Se prestará espe-
trógeno” (http://www.epa.gov aboutpestici-
cial atención al herbicida fenoxiacético pre
des). El alcance de esta definición puede ser
y postemergente Dicamba (DC) utilizado en
mejor comprendido si se considera el con-
cepto de plaga de acuerdo a la misma ley.
hoja ancha en cultivos de interés agroeco-
En ella se establece que una plaga es: 1) “cual-
nómico y a un antibiótico macrocíclico, la
quier insecto, roedor, nematode, hongo, ma-
leza,” o 2) “cualquier otra forma de vida ani-
pectro utilizada mundialmente para comba-
mal o vegetal terrestre o acuática, o virus,
tir las parasitosis del ganado, animales do-
bacteria u otro microorganismo que se de-
mésticos y del ser humano. Para ello realiza-
conceptualizaciones de los plaguicidas, un
Los ejemplos más familiares de plaguici-
breve raconto sobre su historia acompaña-
das incluyen aquellos empleados para elimi-
nar malezas e insectos que pueden reducir
medio ambiental. Finalizaremos esta revisión
el rendimiento y dañar la calidad de las co-
presentando los resultados sobre el poten-
sechas agrícolas, plantas ornamentales, bos-
cial genotóxico y citotóxico de ambos com-
ques, estructuras de madera y también pas-
puestos y algunas de sus formulaciones co-
turas. Esta amplia definición también inclu-
merciales obtenidos en nuestro laboratorio
ye a otros productos cuyos usos como pla-
guicidas son menos reconocidos. Por ejem-plo, las sustancias empleadas para controlarmohos, royas, algas y otros organismos per-
PLAGUICIDA Y PESTICIDA
judiciales que crecen sobre maquinarias, enla superficie del agua o en granos almacena-
Alcances y limitaciones de su definición
dos, son también plaguicidas. El términotambién se aplica a los desinfectantes y agen-
La palabra plaguicida, según la Real Acade-
tes para esterilización, repelentes para insec-
mia Española (http://www.rae.es), es sinó-
tos, venenos para combatir roedores, entre
nimo de pesticida y hace referencia a los
otros. Una discusión pormenorizada sobre
agentes que se emplean para combatir pla-
qué es y qué no es un plaguicida, en el con-
gas. Los plaguicidas pueden ser definidos
texto de la ley FIFRA, puede consultarse en
desde ámbitos más específicos. La Agencia
Un segundo ámbito específico para defi-
por su sigla en inglés), uno de los referentes
nir a los plaguicidas es la brindada por la
mundiales en materia de plaguicidas, regula
Organización de las Naciones Unidas para
el empleo de los mismos bajo la autoridad
la Agricultura y la Alimentación (FAO, por
de la Ley Federal Sobre Insecticidas, Fungi-
su sigla en inglés). Esta entidad contempla
cidas y Rodenticidas (FIFRA, por su sigla
como plaguicida a: “cualquier sustancia o
Theoria, Vol. 17 (2): 2008
mezcla de sustancias destinadas a prevenir,
Breve historia
destruir o controlar cualquier plaga, inclu-yendo los vectores de enfermedades huma-
Fuera de los contextos institucionales antes
nas o de los animales, las especies no desea-
desarrollados todas las personas poseen una
das de plantas o animales que causan per-
noción intuitiva acerca de las plagas y de los
juicio o que interfieren de cualquier forma
plaguicidas, nociones totalmente orientadas
en la producción, elaboración, almacena-
hacia el beneficio propio. El hombre lucha
miento, transporte o comercialización de
contra organismos que afectan sus intereses
alimentos, productos agrícolas, maderas y sus
de alguna forma, ya fuera por interferir en la
productos o alimentos para animales, o que
producción de alimentos como por disemi-
nar enfermedades o sencillamente constituir
combatir insectos, arácnidos u otras plagas en
molestias por su mera presencia (Aspelin,
o sobre sus cuerpos” (http://www.fao.org).
plaguicida se remonta a 2.500 años a.C.
el término plaguicida engloba una enorme
cuando los sumerios cubrían sus cuerpos con
cantidad de compuestos activos, sustancias
compuestos azufrados para repeler insectos
y ácaros (Taylor et al., 2006). Los griegos y
que hacen difícil su acotamiento como una
familia o tipo de compuestos. La EPA tiene
químicas para controlar plagas de insectos,
principalmente compuestos azufrados y ex-
50.000 plaguicidas comerciales diferentes
(Domenech, 2004). A raíz de ello es preciso
2004). Hacia el año 1000 a.C., Homero re-
hacer una primera puntualización en cuan-
firió la utilidad del sulfuro como un agente
to a las denominaciones y definiciones usa-
das erróneamente en referencia a términos
Durante varios siglos la lucha contra las
como compuestos fitosanitarios, plaguicidas,
plagas se basó en el uso de algunas sustan-
cias químicas que fueron identificadas como
útiles para combatir insectos, ratas y rato-
arsenal químico utilizado para el control de
nes. Sin embargo, la lucha no fue exitosa en
plagas, sea cual sea su origen (animal o ve-
la medida que los organismos plaga no eran
getal). Así, bajo esta denominación están los
bien conocidos y que las medidas implemen-
herbicidas, acaricidas, nematicidas, fungici-
tadas incluían no sólo conocimientos empí-
das e insecticidas. Estos compuestos suelen
ricos, sino también prácticas religiosas y má-
encuadrarse bajo el vocablo genérico de pla-
gicas (Aspelin, 2003). El progreso en el co-
guicidas o pesticidas. Cabe destacar que bajo
nocimiento y uso de sustancias plaguicidas
el término de fitosanitarios se incluyen tam-
bién sustancias reguladoras del crecimiento
cuando se emplearon prácticas de control
(fitoestimulantes o fitohormonas). Los ferti-
sobre la base de observaciones más precisas,
lizantes son compuestos añadidos para mejo-
entre ellas el uso de extractos de hojas de
rar el rendimiento de la planta en cuanto a su
tabaco (Taylor et al., 2006).
crecimiento y productividad, su potencial
más rigurosa y sistemática recién en el siglo
anteriores; y en lo que a los agroquímicos res-
pecta, éstos engloban a todos aquellos insu-
naturales como el azufre, cobre, arsénico y
mos de síntesis aplicados al campo, es decir
fósforo de los cuales se descubrió su acción
fertilizantes y plaguicidas (Domenech, 2004).
Genotoxicidad y citotoxidad de pesticidas. Evaluación de los principios activos. / N. V. GONZÁLEZ ET AL.
conjunto, estos plaguicidas organosintéticos
empleo masivo como el verde de París y la
mezcla de Bordeaux la cual actualmente con-
insecticidas, fungicidas o herbicidas.
tinúa siendo un fungicida empleado en di-
versos cultivos (Aspelin, 2003; Taylor et al.,
plaguicidas se tornó una práctica habitual
2006). También en este siglo comienza el
uso de los primeros plaguicidas orgánicos
como los nitrofenoles, clorofenoles, creosota,
un problema inesperado fue el desarrollo de
naftaleno y aceites derivados del petróleo
resistencia por parte de ciertas plagas, parti-
cularmente de los insectos frente a la cons-
La génesis de la era moderna de los pla-
tante presión ejercida por los pesticidas. Este
guicidas se inicia en 1939 con el descubri-
problema continúa hasta nuestros días; se
miento de las propiedades insecticidas del
calcula que unas 500 especies de insectos
presentan algún nivel de resistencia al me-
primer uso durante la Segunda Guerra Mun-
nos a un tipo de insecticida (Taylor et al.,
dial (IARC, 1991; Ware, 2004). Su facili-
2006). Tras años de empleo masivo, los resi-
dad de obtención y aplicación, la rapidez de
duos de pesticidas empezaron a aparecer en
sus resultados y su costo reducido extendie-
ron rápidamente su uso indiscriminado, sin
resultó manifiesta en los niveles más altos
sospechar los efectos negativos sobre los se-
de las cadenas tróficas (Mondragón Aguilar,
res vivos y el ambiente (http://iibce.edu.uy/
2002). Así, en la década de 1960 surge la
posdata/drit.html). Se convirtió en el arma
preocupación por estas consecuencias inde-
preferida en la lucha contra la malaria y el
seables, preocupación que se origina entre
tifus pero su uso agrícola fue prohibido en
los investigadores y llega a la población ge-
casi todos los países a partir de los ’70, tras
neral a través del libro “Primavera silencio-
la comprobación de ciertos peligros para la
sa” (Carson, 1962) proporcionando unidad
salud humana y el medio ambiente (http://
y fuerza a lo que hasta entonces era una con-
ciencia incipiente. Entre los ’60-’80 se in-
corporan al mercado nuevas familias de quí-
cuando el uso de los plaguicidas se extiende
micos, entre ellas las triazinas (1969), los
por todo el mundo desarrollado. Desde en-
piretroides sintéticos (1979) y las sulfonilu-
tonces se han producido importantes avan-
reas (1985). La introducción de nuevos pla-
ces en la producción y uso de plaguicidas
guicidas hasta llegar a la actualidad ha con-
(Aspelin, 2003), estrechamente vinculados
tinuado a un ritmo menor a lo acaecido tras
con los cambios introducidos en los mode-
los de producción y cultivo que duplicaron
los estándares de seguridad, salud y ambiente
la productividad de la agricultura respecto
requeridos por las entidades responsables de
al resto de la economía (http://iibce.edu.uy/
la regulación de su empleo (Aspelin, 2003).
posdata/drit.html). Una intensa actividad en
Por último, cabe considerar a los biopestici-
el campo de la investigación devino en el
ternativas más seguras que no producen bio-
sintéticos, inicialmente los organoclorados,
seguidos luego por otros plaguicidas más
(Ware, 2004). Se trata de ciertos tipos de
“suaves” como los organofosforados y los
pesticidas derivados de materiales naturales
carbamatos (Mondragón Aguilar, 2002). En
obtenidos de animales, plantas, bacterias y
Theoria, Vol. 17 (2): 2008
algunos minerales (http://www.epa.gov). A
directa o indirectamente con la estructura,
fines de 2001, EE.UU. contaba con 200 in-
función y patrón hormonal o alterar el nú-
gredientes activos de biopesticidas registrados
mero de receptores hormonales y su afinidad
y 800 productos comerciales (Ware, 2004).
por moléculas específicas (Tiemann, 2008). Actúan, además, alterando el desarrollo ová-rico y su función así como también la acti-
Medioambiente y salud humana
vidad del endometrio desencadenando alte-
raciones durante la implantación (Rosselliet al., 2000; Tiemann, 2008).
El uso continuo e indiscriminado de los pla-
guicidas no sólo ha causado enfermedades y
la exposición accidental a plaguicidas y a
muertes por envenenamiento a corto y lar-
go plazo (Waterhouse et al., 1996), sino tam-
de tener un papel en la etiología de ciertas
bién ha afectado al medio ambiente, acu-
enfermedades, tales como la enfermedad idio-
mulándose por bioconcentración en los dis-
pática de Parkinson (Dhillon et al., 2008).
tintos eslabones de la cadena alimenticia, en
el suelo y en el agua (Freemark y Boutin,
sugieren que los pesticidas causarían un pro-
1995). Los plaguicidas son responsables ade-
ceso neurodegenerativo que conllevaría al
más de la resistencia a insecticidas y herbici-
desarrollo de esta patología (Costello et al.,
das (Bourguet et al., 2000), sin por ello res-
2009). Sin embargo, los datos epidemioló-
tar importancia a la destrucción de parásitos,
gicos sobre personas expuestas con riesgo de
predadores naturales y polinizadores, entre
contraer la enfermedad resultarían insufi-
otros tantos integrantes del ecosistema, los que
cientes y escasos para avalar dichas sugeren-
han visto alterado su ciclo de vida a causa de
cias. Se realizaron estudios de caso-control
estos productos (Freemark y Boutin, 1995).
para evaluar el posible riesgo de contraer
dicha patología ante la exposición a diver-
y abuso de plaguicidas, los accidentes y en-
fermedades asociadas crecieron muy signifi-
maneb (Costello et al., 2009; Dhillon et al.,
cativamente (http://iibce.edu.uy/posdata/
2008). Los resultados evidenciaron que las
drit.html). Estudios in vitro e in vivo han
puesto de manifiesto que la exposición pro-
combinación de ambos, incrementaron sig-
longada a compuestos organoclorados, tales
nificativamente el riesgo de contraer la en-
fermedad, particularmente en sujetos jóve-
nes o cuando la exposición ocurre a tempra-
na edad (Costello et al., 2009). De forma se-
(4clorofenil)metanol) y el lindano, entre
entre el riesgo de contraer el mal de Parkinson
reproductivas en varias especies animales y
con la exposición a rotenona y otros pestici-
son capaces de influenciar el desarrollo de
los ovocitos y la preimplantación embrio-
naria (Walker et al., 2000). Los pesticidas
dos para ofrecer una alta especificidad de
organoclorados poseen propiedades estrogé-
acción, su uso genera innumerables efectos
nicas resultando en efectos adversos sobre el
indeseados como la generación de organis-
sistema reproductivo en hembras de varias
mos resistentes, la persistencia ambiental de
especies animales (Kupfer, 1975). Estos com-
residuos tóxicos y la contaminación de re-
puestos pueden ser capaces de interactuar
cursos hídricos con degradación de la flora
Genotoxicidad y citotoxidad de pesticidas. Evaluación de los principios activos. / N. V. GONZÁLEZ ET AL.
y fauna. La adquisición de resistencia en la
En lo particular, en la República Argen-
especie a combatir requiere de un incremen-
tina, datos publicados durante el “Taller
to de las cantidades necesarias de pesticida
Regional sobre Intoxicaciones por Plaguici-
usado y/o su sustitución por agentes más
das y Armonización en la Recolección de la
tóxicos para lograr controles aún más efecti-
Información” (Ministerio de Salud, Secre-
vos. (http://iibce.edu.uy/posdata/drit.html).
taría de Programas Sanitarios, Subsecretaría
de Programas de Prevención y Promoción,
pesticidas dependen del compuesto, la do-
sis, la vía y el tiempo de exposición ocasio-
relevancia de las exposiciones e intoxicacio-
nes causadas por plaguicidas. Las estadísti-
cir al deceso del individuo, asociados gene-
cas demuestran que el 92% de las mismas se
ralmente a accidentes donde una única do-
deben a uso domiciliario (Tabla I). De la mis-
sis alta es suficiente para provocar tempra-
ma fuente es factible identificar a los herbici-
namente dichos efectos. Opuestamente, los
das y los insecticidas fosforados como los
efectos pueden ser crónicos debido a expo-
causales de mayor incidencia de exposicio-
siciones repetidas cuyos síntomas y signos
nes-intoxicaciones a plaguicidas de uso agrí-
cola y en menor escala a los insecticidas car-
contacto con el pesticida (http://iibce.edu.
bamatos y piretroides y a fungicidas (Fig. 1). Tabla I. Exposiciones-intoxicaciones por plaguicidas según tipo de plaguicida. Tipo de plaguicida Figura 1. Incidencia de exposiciones-intoxicaciones a plaguicidas de uso agrícola en Argentina. Theoria, Vol. 17 (2): 2008 ENSAYOS DE GENOTOXICIDAD Y
de su uso, teniendo en cuenta la salud hu-
CITOTOXICIDAD DE PLAGUICIDAS
mana y los efectos ecológicos del herbicida. DE USO MASIVO EN ARGENTINA
La información que se consigna a continua-ción proviene del documento de la mencio-
Análisis del herbicida fenoxiacético
nada revisión (“Reregistration Eligibility
Dicamba y su formulación comercial
Decision for Dicamba and Associated Salts”)
Banvel®
La información toxicológica sobre el DC
El DC (ácido 3,6-dicloro-2-metoxibenzoico
en ensayos de toxicidad aguda indica que en
o 2-metoxi 3,6 diclorobenzoico) se caracte-
riza por ser un compuesto de fórmula empí-
toxicidad oral y dérmica, respectivamente,
a la familia del ácido benzoico. Es soluble
terminada para la toxicidad por inhalación.
en agua (6,5 g/l a 25ºC), tiene una baja
Por estos hallazgos, ha sido categorizado
es estable a la oxidación e hidrólisis en con-
(http://www.epa.gov). Los ensayos de toxi-
cidad crónica realizados mediante un estu-
dio reproductivo multigeneracional en ra-
su agonismo respecto de las auxinas. Causa
tas permitieron establecer valores de NOAEL
el crecimiento descontrolado y rápido de los
y LOAEL de 45 y 136 mg/kg/día, respecti-
tallos, pecíolos y hojas en las plantas sensi-
vamente. Se encontró una reducción en el
bles. La división celular excesiva, a su vez,
peso de las crías a partir de un valor de
resulta en la destrucción de los tejidos vas-
LOAEL de 136 mg/kg/día (htttp://www.
culares que conducen a la muerte del vege-
tal. El control de las malezas se logra en 5 a
7 días (EPA, 1983, 2006). Se registró por
capacidad herbicida en todo el mundo. Así,
primera vez en los EE.UU. en 1967 para ser
empleado como herbicida selectivo para el
los 15 herbicidas más empleados en el sec-
control pre- y post-emergente de malezas de
tor agrícola durante el período 1987-2001.
hoja ancha, aunque fue descrito y patentado
Su consumo como principio activo se esti-
en 1961 por Velsicol Chemical Corp. (EPA,
ma en el rango de 2.268 - 3.175 toneladas
1983). Los usos registrados incluyen su apli-
en el año 2001. En el mismo país, fuera del
cación en cultivos de avena, cebada, cente-
sector agrícola, el DC ocupa el sexto lugar
no, trigo, maíz, sorgo, soja y caña de azúcar
entre los 10 principios activos herbicidas más
como también en campos de golf, parques y
empleados en hogares, jardines, industrias y
jardines urbanos (EPA, 1983). Las formula-
presados en toneladas, se calculan en el ran-
contienen otros principios activos, entre
go de 907 - 1.814 en el año 2001 (Kiely etal., 2004). En Argentina es uno de los her-
espectro más amplio en el control de male-
bicidas auxínicos de mayor uso, utilizado a
través de sus múltiples derivados comercia-
les, en el tratamiento de cultivos agrícolas.
revisión de los pesticidas registrados antes
en la cosecha 2003/2004 se aplicaron 41.300
toneladas de otros herbicidas distintos del
misma fue reevaluar los riesgos potenciales
glifosato en las plantaciones de soja. El uso
Genotoxicidad y citotoxidad de pesticidas. Evaluación de los principios activos. / N. V. GONZÁLEZ ET AL.
riesgo potencial por efectos adversos ocasio-
desde el año 2001 y el del DC en un 157%
nados sobre la reproducción y el desarrollo
rante el año 2007, en Argentina, 24 empre-
ingesta de materia vegetal (EPA, 2006).
sas de agroquímicos comercializaron 35 pro-
Los estudios sobre la genotoxicidad y ci-
totoxicidad del DC y sus formulaciones co-
merciales han abordado sus efectos en dis-
Las investigaciones sobre los riesgos am-
tintos organismos –bacterias, vegetales, in-
bientales del DC revelan que este compues-
sectos, roedores, seres humanos– y diversos
to es muy soluble y móvil en estudios de
tipos celulares. En sistemas bacterianos el
suelo realizados en laboratorio (EPA, 2006).
DC induce mutaciones inversas en diferen-
El metabolismo aeróbico en los suelos es el
tes cepas de Salmonella typhimurium (Plewa
principal proceso de degradación de este
et al., 1984) y daño en el ADN de Bacillus
ácido benzoico. Su vida media es de 6 días
subtilis rec A y Escherichia coli pol A (Leifer
con la formación de DCSA (3,6-diclorosa-
et al., 1981; Waters et al., 1981). Arabidopsis
licílico), un metabolito que se degrada en la
thaliana y Tradescantia sp. tratadas con DC
misma proporción que el principio activo
y/o una de sus formulaciones comerciales evi-
(EPA, 2006). Bajo condiciones anaeróbicas,
denciaron un efecto significativo en la frecuen-
el DC tiene una vida media de 141 días y su
cia de recombinación homóloga A ––> G
(Filkowski et al., 2003) y un aumento do-
(EPA, 2006). Hasta el presente, no se dis-
sis-dependiente en la frecuencia de micro-
pone de datos relacionados con el metabo-
lismo aeróbico de este herbicida en cuerpos
tivamente. En sistemas animales se conoce
de agua. Los datos disponibles sobre la toxi-
que el DC induce la proliferación de peroxi-
cidad aguda en especies acuáticas indican que
somas (Espandiari et al., 1995), la pérdida
el DC es levemente tóxico para los peces y
de la actividad fosforilativa en mitocondrias
(Peixoto et al., 2003a, b) y tiene actividad
(EPA, 2006). En el caso de la vegetación
promotora en un modelo de estudio de car-
acuática, el DC no resulta tóxico para plan-
cinogénesis en ratas (Espandiari et al., 1999).
tas vasculares pero de acuerdo a los estánda-
También se cuenta con estudios del daño
res gubernamentales establecidos sería po-
tencialmente riesgoso para plantas no vas-
culares en las cuales afectaría el crecimiento
(1994) demostraron que el herbicida no in-
y el desarrollo (EPA, 2006). En particular,
duce aberraciones cromosómicas en las cé-
las dicotiledóneas son mucho más sensibles
lulas de la médula ósea de ratas expuestas invivo. Waters (1981) encontró que el DC no
2006). Las sales de DC se han clasificado
induce mutaciones letales recesivas ligadas
como prácticamente no tóxicas para espe-
al sexo en Drosophila melanogaster. A dife-
cies aviares (EPA, 2006); la forma ácida del
rencia de los resultados anteriores, el poten-
DC recibe la misma categoría en el caso de
cial genotóxico del DC ha sido demostrado
pequeños mamíferos sometidos a una expo-
en diversos sistemas in vitro; entre ellos se
sición oral aguda (EPA, 2006). Sin embar-
cuentan los ensayos realizados en linfocitos
go, de acuerdo a estudios en los cuales se
humanos (Perocco et al., 1990) y en líneas
estima el riesgo por el consumo crónico de
celulares establecidas (Sorensen et al., 2004,
vegetales y otros alimentos que contienen
2005). Estudios realizados en cultivos de lin-
residuos de DC, los mamíferos estarían en
Theoria, Vol. 17 (2): 2008
ron un incremento significativo de la fre-
traciones de 200,0-500,0 µg/ml y 500 µg/
cuencia de intercambios de cromátidas her-
ml de DC y Banvel®, respectivamente (Gon-
zález et al., 2007). El ensayo cometa mostró
presencia de la fracción metabólica S-9
(Perocco et al., 1990). En ensayos en los
cadena simple en la molécula de ADN, evi-
cuales se emplearon células de ovario de
denciado por un aumento en la proporción
hámster chino (CHO), la interacción del
de células dañadas y una reducción en la
proporción de células no dañadas luego del
empleo de 50,0-500,0 µg/ml y 100,0-500,0
mediante el ensayo cometa (Sorensen et al.,
el daño genotóxico y citotóxico ejercido por
hemos investigado es la determinación del
el DC y su formulación comercial Banvel®
posible mecanismo/s por el cual los mismos
mediante ensayos in vitro de genotoxicidad
ejercen daño sobre el ADN (González et al.,
y citotoxicidad en un rango de concentra-
ciones de 10,0-500,0 µg/ml y de 1,0-500,0
momento nos permitirían inferir que la ge-
µg/ml en linfocitos humanos (González et
notoxicidad y la citotoxicidad del DC sería
al., 2006) y células CHO-K1 (González et
ejercida mediante la liberación de especies
al., 2007, 2009), respectivamente. En lin-
reactivas de oxígeno en tanto que los xeno-
bióticos presentes en el excipiente de su for-
mulación comercial Banvel® actuarían por
Banvel® ejercieron un aumento significati-
un mecanismo de daño distinto (González
vo de la frecuencia de ICHs que no resulta-
et al., 2009). Esta hipótesis surge de ensayos
ron ser concentración-dependiente. La pro-
gresión del ciclo celular de los linfocitos
el compuesto puro o su formulación comer-
mostró variaciones debidas a un alargamien-
cial en presencia y ausencia de vitamina E.
to del ciclo celular y por consiguiente a una
reducción en el índice de replicación celular
antioxidante de comprobada acción en va-
rios tipos celulares de mamíferos (Abid-Essefi
et al., 2003; Patel et al., 1998; Siviková et
DC y Banvel®, respectivamente (González
al., 2001; Soloneski et al., 2003; Weitberg
et al., 2006). En el caso de las células CHO-
et al., 1985). Su incorporación a los cultivos
K1, los tratamientos con DC o Banvel® die-
inhibió el daño ejercido por el DC, refleja-
do en la prevención de la muerte celular, el
cuencia de ICHs para la totalidad de las con-
acortamiento del ciclo celular y en la dismi-
centraciones ensayadas. De manera similar
nución de la frecuencia de ICHs. Con res-
a lo encontrado en los cultivos de linfocitos
pecto a los cultivos expuestos a Banvel®, la
humanos, el incremento en la frecuencia de
adición de vitamina E no fue capaz de inhi-
ICHs para las células CHO-K1 fue concen-
bir totalmente los efectos genotóxicos y
tración-independiente. Asimismo, y al igual
citotóxicos. Por este motivo ha sido posible
que lo observado en linfocitos humanos, el
postular que el excipiente presente en la for-
DC y el Banvel®, indujeron un retraso en la
progresión del ciclo celular y, en consecuen-
deletéreo por un mecanismo no mediado por
cia, una reducción en el índice de replica-
liberación de especies reactivas de oxígeno.
ción celular, luego del empleo de concen-
Banvel® contiene un 42,29% de excipientes
Genotoxicidad y citotoxidad de pesticidas. Evaluación de los principios activos. / N. V. GONZÁLEZ ET AL.
tras de suelo colectadas en las cercanías del
investigaciones han demostrado que las for-
golfo que bordea al océano cerca de la ciu-
mulaciones comerciales de ciertos pesticidas
dad de Ito, región de Shizuoka, Prefectura
de Japón (Yoon et al., 2004) y utilizaron para
Nematospiroides dubius. El caldo ensayado
Mueller, 2002; Kaya et al., 1999; Soloneski
resultó ser activo contra el parásito sin evi-
et al., 2002, 2008; Zeljezic et al., 2006).
denciar un notable efecto tóxico para el ra-
Nuestros resultados avalarían estas observa-
tón (Egerton et al., 1979). La cepa que pre-
ciones y corroborarían que el efecto deletéreo
sentaba dicha actividad antihelmíntica, MA-
inducido por el Banvel® se debería a la pre-
4680 fue aislada, perfeccionada y renombra-
sencia de xenobióticos con capacidad geno-
da sobre caracteres morfológicos, fisiológi-
tóxica y citotóxica los cuales estarían actuan-
cos, bioquímicos y filogenéticos como una
do por un mecanismo distinto al propuesto
nueva especie de actinomiceto Streptomyces
para el compuesto puro (González et al.,
avermectinius (Kita et al., 2007; Omura y
Crump, 2004; Takahashi et al., 2002).
a partir de aquella muestra y denominados
ANÁLISIS DEL ANTIHELMÍNTICO IVERMECTINA Y SU FORMULA-
la serie B, que presentan un grupo 5-hidroxi,
CIÓN COMERCIAL IVOMEC®
son marcadamente más activos que los de laserie A, caracterizados por presentar en su
La IVM, un endectócido semisintético que
estructura química un grupo 5-metoxi. La
actúa contra un rango diverso de nemátodos,
reducción sobre el doble enlace de los C y
insectos y arácnidos, tiene sus orígenes en el
Instituto Kitasato de Japón (Burg et al.,
éstos un amplio espectro de actividad bioci-
1979; Kita et al., 2007). Forma parte de la
da con una muy baja toxicidad para los ma-
familia de las avermectinas, lactonas macro-
míferos. El complejo B1 resultante 22,23
cíclicas que presentan un disacárido sobre el
C del macrociclo (Wei et al., 2005) y de la
cual también forman parte un complejo de
droga de uso veterinario bajo el nombre ge-
nérico de IVM (Chabala et al., 1980; Omura
que exhiben un extraordinario potencial an-
y Crump, 2004; Zhang et al., 2006).
tihelmíntico (Burg et al., 1979; Yoon et al.,
La IVM resultó ser altamente eficaz con-
tra varios artrópodos parásitos, incluyendo
natural derivado de un proceso de fermenta-
garrapatas, pulgas, piojos, ácaros y estadios
ción de una especie de actinomiceto, NRRL
larvarios de algunos dípteros (Omura, 2008),
así como también para controlar nemátodos
Streptomyces avermitilis (Burg et al., 1979;
Ikeda et al., 1987; Miller et al., 1979).
tracto gastrointestinal, pulmón y riñón del
ganado, en adición a otros nemátodos como
entre investigadores del Instituto Kitasato y
lo son Thelazia spp. y Parafilaria spp. (Campbell
y Benz, 1984; Campbell et al., 1983; Kita et
realizaron estudios in vitro a partir de mues-
veterinaria. Es una medicación con más de
Theoria, Vol. 17 (2): 2008
20 años de demostrada utilidad en la salud
hincapié en la acción de la IVM, droga que
nos ocupa en esta revisión, se conoce que la
excelencia para la filariasis linfática y la
en células nerviosas y musculares, inhibiendo
droga de elección en la mayoría de las infes-
la neurotransmisión al impedir el cierre de
taciones cutáneas que afectan a poblaciones
los mismos (Shan et al., 2001). Consecuen-
de America Latina y África, entre otras (Shan
et al., 2001; Victoria, 2003).
altamente su permeabilidad a los iones Cl-,
Su utilidad en niños, ya sea en forma oral,
los cuales hiperpolarizan la membrana neu-
a dosis de 200 mg/Kg, como en administra-
ción tópica, a dosis de 400 mg/Kg, consti-
sión nerviosa. Esto conlleva a la parálisis de
tuye una terapia eficaz, segura, barata y de
la musculatura somática, particularmente la
fácil administración. Sus indicaciones en
faríngea, conduciendo a la muerte del pará-
endoparásitos incluyen: ascaridiasis, estron-
sito. Los canales de Cl-, relacionados con el
giloidiasis, tricuriasis y enterobiasis. En lo que
GABA, los cuales sólo están presentes en
respecta a ectoparásitos es útil en pediculosis,
nemátodos, insectos y garrapatas, son inhi-
escabiosis incluyendo la forma eritrodérmica,
bidos únicamente a elevadas concentracio-
miasis, larva migrans cutánea, dermodicido-
sis, tungiasis, toxocariasis, gnatostomiasis y
cisticercosis (Osorio et al., 2006; Prayaga y
se encuentran localizados en las neuronas del
Mannepuli, 2006; Victoria, 2003). El blan-
sistema nervioso central, mientras que en los
co de esta actividad antiparasítica se cree
artrópodos y nemátodos ellos están locali-
corresponde a la sensibilidad a la IVM por
zados en el sistema nervioso periférico. Si
parte del receptor de los canales de Cl- de-
pendientes de glutamato (GluClR), distri-
canales dependientes de glicina en mamífe-
buidos en un gran número de phyla de in-
ros, la afinidad por los mismos en insectos
vertebrados. Es conocido que la IVM actúa,
también, como un agente anticonvulsivan-
la presentada en mamíferos. Debe destacar-
te en vertebrados. Teniendo en cuenta que
no ha sido demostrado que existan en verte-
juega la glicoproteína P en el mantenimien-
brados los GluClRs, la acción anticonvulsi-
to de la barrera hematoencefálica (Geoffrey,
vante de la IVM está asociada a receptores
2003), lo cual, sumado a la baja afinidad de
del ácido γ-amino butírico (GABA) tipo A
mamíferos, permite la ingesta de la droga
en dosis relativamente bajas con un alto gra-
necen a la superfamilia de canales iónicos
dependientes de ligando, los que presentan
numerosas homologías estructurales y fun-
cionales con otros miembros, tales como los
nocimiento de estudios realizados sobre el
receptores de glicina, de acetilcolina y de
posible potencial genotóxico y/o citotóxico
serotonina (Krause et al., 1998; Shan et al.,
de la IVM, ya sea sobre el organismo vector
(generalmente un invertebrado) o incluso el
ser humano, en los cuales el compuesto es
análogos ha sido investigado en varios miem-
empleado para prevenir las variadas parasi-
bros de la superfamilia de canales iónicos
tosis (Soboslay et al., 1992; Amazigo, 1999;
Sturchio, 2001; Rodríguez Pérez et al., 2006).
Genotoxicidad y citotoxidad de pesticidas. Evaluación de los principios activos. / N. V. GONZÁLEZ ET AL.
Sin embargo, existe amplia información de
estudios realizados in vivo destinados a eva-
cultivo y, a su vez, que dicho efecto se po-
luar la forma de administración, las diferen-
tes dosis terapéuticas dependiendo del pa-
rásito en cuestión y del vertebrado hospeda-
dor (Lifschitz et al., 2007), la sensibilidad
analizó, mediante diversos ensayos in vitro
del invertebrado a la droga (Intapan et al.,
de genotoxicidad (frecuencia de ICHs y en-
2006) y las posibles resistencias de estos úl-
sayo cometa) y citotoxicidad (progresión de
timos a la misma (Kane et al., 2000; Fiel et
ciclo celular, índice mitótico, ensayos de
MTT y rojo neutro), la capacidad deletérea
sido evaluada la actividad de la IVM como
ciones comerciales Ivomec® (IVM 1%, Merial
un potente inhibidor de la propagación de
Argentina S.A.). Los resultados han puesto
células tumorales (Korystov et al., 2004) y su
en evidencia que ambos compuestos ejercen
potencial de acción cuando es administrada
un efecto genotóxico y citotóxico en células
conjuntamente con otras drogas (Amsden etal., 2007). Cabe señalar que fue identifica-
a concentraciones equimolares del principio
activo de 1,0-250,0 µg/ml (Molinari et al.,
ble del metabolismo de la IVM por parte de
microsomas hepáticos (Zeng et al., 1998).
cias internacionales reguladoras de su em-
pleo terapéutico no han evaluado, o al me-
capacidad citotóxica a partir de la concen-
nos definido, el potencial mutagénico, car-
tración de 10,0 µg/ml incorporada al siste-
cinogénico y/o teratogénico de la IVM ya
ma de cultivo. De esta forma, la concentra-
sea en lo que respecta al hombre como a cual-
ción de 10,0 y 25,0 µg/ml de IVM así como
quier otra especie animal expuesta a la mis-
únicamente 25,0 µg/ml de Ivomec® induje-
ron un alargamiento del ciclo celular. Con-
clusión acerca de la real clasificación de este
bos antibióticos indujeron un notable efec-
de las avermectinas, la abamectina, ha sido
to citotóxico evidenciado por una franca
clasificado como un pesticida clase II con
inhibición del crecimiento celular debido a
moderados efectos tóxicos para las especies
que la actividad de las mismas disminuyó
que la IARC no ha incluido a éste antibióti-
co como carcinógeno (http://www.iarc.fr).
bajas concentraciones (1,0-10,0 µg/ml) am-
a caracterizar la citotoxicidad de la IVM, sólo
hormética para los ensayos de citotoxicidad
ha sido reportado, hasta el presente, datos
empleados (Molinari et al., 2008).
provenientes de un único estudio in vitro
Mediante el uso de los diferentes ensayos
realizado en células CHO, estimando la ca-
de genotoxicidad, nuestros resultados de-
pacidad de proliferación celular en un me-
indujo un incremento significativo de ICHs.
sustituto en presencia de diferentes dosis de
Por el contrario, mediante el ensayo cometa
la droga (Rodrigues y Mattei, 1987). En el
fue factible evidenciar que concentraciones
mismo se observó que las células retardaban
Theoria, Vol. 17 (2): 2008
rango de 5,0-50,0 µg/ml fueron capaces de
son, en muchos casos, más perjudiciales que
el daño ocasionado por el compuesto acti-
vo. Nuestros resultados obtenidos in vitro
drían en evidencia que, si bien el antibióti-
no sólo son un ejemplo de este último con-
co es capaz de generar lesiones en la molé-
cepto sino que ponen de manifiesto que en
cula de ADN, las mismas no serían respon-
sables de la inducción de ICHs, al menos en
suficiente conocer el impacto genotóxico y
el sistema celular empleado (Molinari et al.,
citotóxico de un principio activo sino el evi-
denciado por el complejo principio activo-
excipiente/s de la formulación comercial dis-
que el antiparasitario IVM ejerce efectos
deletéreos sobre el metabolismo celular y la
resulta evidente que los efectos deletéreos de
maquinaria genética de células de mamífe-
los excipientes presentes en las formulacio-
ros, al menos en células de la línea CHO-
nes comerciales no deben ser descartados o
K1. Asimismo, las comparaciones de los re-
sultados obtenidos en cada uno de los ensa-
jar de mencionar que un único bioensayo es
yos realizados demostraron que de los dos
insuficiente como indicador para lograr ca-
compuestos evaluados, la IVM resultó po-
racterizar la toxicidad de un pesticida en es-
seer una mayor genotoxicidad y citotoxici-
dad respecto a concentraciones equimolaresdel principio activo presentes en Ivomec®. Esto último claramente pone de manifiesto,
AGRADECIMIENTOS
además, que el excipiente presente en la for-mulación comercial sería verdaderamente
Este trabajo ha sido financiado a través de
inerte al momento de interactuar con el sis-
tema celular y originar en consecuencia al-
Nacional de Investigaciones Científicas y
gún tipo de daño en la misma (Molinari et
versidad Nacional de La Plata (11/N493 y11/N564) y la Agencia Nacional de Promo-ción Científica y Tecnológica (BID 1728/
CONSIDERACIONES FINALES
OC-AR- PICT 2004 Nro. 26116) de Ar-gentina.
Finalmente, no podemos dejar de enfatizarel hecho que todos los seres vivos estamosdirecta o indirectamente expuestos, no sólo
REFERENCIAS
a los principios activos de los plaguicidas,sino a sus formulaciones comerciales. Las
rios principios activos con actividad tóxica
y un excipiente teóricamente inerte desde el
fragmentation, apoptosis and cell cycle ar-rest induced by zearalenone in cultured
punto de vista biológico. Sin embargo, nu-
DOK, Vero and Caco-2 cells: prevention by
merosos estudios realizados tanto in vitro
como in vivo han demostrado que, en la
mayoría de los casos, los riesgos potenciales
a los que los seres vivos se ven sometidos
por exposición a formulaciones comerciales
Genotoxicidad y citotoxidad de pesticidas. Evaluación de los principios activos. / N. V. GONZÁLEZ ET AL.
Ivermectin, a new broad-spectrum antipara-
sitic agent. J. Med. Chem. 23, 1134-1136.
combination of ivermectin and albendazole
in healthy volunteers. Am. J. Trop. Med.
Parkinson’s disease in East Texas. J. Agro-
United States: Trends During the 20th Cen-
tury. NSF CIPM Technical Bulletin 105. NSF
Center for Integrated Pest Management.
new family of potent anthelmintic agents:
efficacy of the B1a component. Antimicrob.
and dominance levels. J. Econ. Entomol. 93,
ity of the herbicide dicamba (2-methoxy-3,
Transdermal penetration of atrazine, alachlor,
hepatocarcinogenesis Int. J. Oncol. 14, 79-84.
and trifluralin: effect of formulation. Toxicol.
acid) is a peroxisome proliferator in rats.
(1979) Avermectins, new family of potent an-
thelmintic agents: producing organism and fer-
cooperia to ivermectin treatments in grazing
mentation. Antimicrob. Agents Chemother.
cattle of the humid pampa, Argentina. Vet.
Ivermectin: a review of efficacy and safety. J.
revealed by transgenic Arabidopsis thaliana
mutation markers. Mutat. Res. 542, 23-32.
antiparasitic agent. Science 221, 823-828.
FISHEL FM (2006) What Is and Isn’t a Pesti-
cide? . PI-96 Pesticide Information Office.
Institute of Food and Agricultural Sciences,
University of Florida. Disponible en URL:
(2009) Parkinson’s disease and residential
exposure to Maneb and Paraquat from agri-
pacts of agricultural herbicide use on terres-
cultural applications in the Central Valley of
trial wildlife in temperate landscapes: A re-
California. Am. J. Epidemiol. In Press.
view with special reference to North America.
GEOFFREY E (2003) Ivermectin: does P-gly-
coprotein play a role in neurotoxicity? Filaria
Theoria, Vol. 17 (2): 2008
duced genotoxicity oh Chinese hamster ovary
filter paper culture technique for screening
(CHO) cells is prevented by vitamin E. J.
of Strongyloides stercoralis ivermectin sen-
sitivity in clinical specimens. Am. J. Trop.
commercial formulation banvel induce geno-
toxicity in Chinese hamster ovary cells.
resistant Drosophila indicate glutamate-gated
analysis of the phenoxy herbicide dicamba
antiparasitics nodulosporic and ivermectin.
in mammalian cells in vitro. Toxicol. In Vitro
(1999) Genotoxicity studies on the phenoxy-
acetates 2,4-D and 4-CPA in the Drosophila
(1994) Genetic safety evaluation of pesticides
wing spot test. Teratog., Carcinog. Mutagen.
in different short-term tests. Mutat. Res. 321,
IARC (1976) Some carbamates, thiocarbamates
(2004) Pesticides Industry Sales and Usage
and carbazides, Monographs on the Evalua-
2000 and 2001 Market Estimates. EPA.
tion of Carcinogenic Risk of Chemicals to
IARC (1986) Some halogenated hydrocarbons
and pesticide exposures, Monographs on the
cal studies. Trends Parasitol. 23, 223-229.
Evaluation of Carcinogenic Risk of Chemi-
cals to Man, Lyon: International Agency for
IARC (1987) Overall evaluation of carcinoge-
Volumes 1 to 42, Monographs on the Evalu-
multidrug resistance of tumor cells. Eur. J.
Lyon: International Agency for Research on
IARC (1991) Occupational exposures in insecti-
cide application, and some pesticides, Mono-
a positive allosteric effector of the alpha7
neuronal nicotinic acetylcholine receptor.
tional Agency for Research on Cancer, p. 612.
KUPFER D (1975) Effects of pesticides and
Genetics studies of avermectin byosinthesis
and function. CRC Crit. Rev. Toxicol. 4, 83-
in Streptomyces avermectilis. J. Bacteriol.
Genotoxicidad y citotoxidad de pesticidas. Evaluación de los principios activos. / N. V. GONZÁLEZ ET AL.
repair-deficient bacteria for predicting geno-
toxicity and carcinogenicity. A report of the
U.S. EPA’s Gene-Tox Program. Mutat Res.
induced genomic damage. An in vitro experi-
ment. J. Exp. Clin. Cancer Res. 17, 419-424.
long-acting formulations in cattle: absorp-
tion pattern and pharmacokinetic consider-
cide dicamba and related compound on plant
ations. Veterinary Parasitology 147, 303-310.
mitochondrial bioenergetics. J. Biochem.
methoxy-3,6-dichlorobenzoic acid) interacts
with mitochondrial bioenergetic functions.
family of potent anthelmintic agents: isola-
tion and chromatographic properties.
Antimicrob. Agents Chemother. 15, 368-371.
tion of genotoxic effects of the herbicide
dicamba using in vivo and in vitro test sys-
mutation assays on genotoxicity of the gas-
tems. Environ. Mol. Mutagen. 15, 131-135.
eous and liquid forms of pesticides. Mutat.
genotoxic properties of herbicides following
plant and animal activation. Mutat. Res. 136,
ivermectin and its formulation ivomec® on
Chinese hamster ovary (CHOK1) cells. J.
tropical souvenir not worth picking up.
influence of serum substitute Ultroser G in
toxicological evaluations in mammalian cells
in vitro. Ecotoxicol. Environ. Saf. 14, 269-
npic.orst.edu/npicfact.htmNational Pesticide
OMURA S (2008) Ivermectin: 25 years and still
Large-scale entomologic assessment of On-
going strong. Int. J. Antimicrob. Agents 31,
chocerca volvulus transmission by poolscreen
PCR in Mexico. American Journal of Tropi-
cal Medicine and Hygiene 74, 1026-1033.
times of ivermectin -A success story. Nat. Rev.
environmental oestrogens influence repro-
ductive function. Hum. Reprod. Upadate 6,
ivermectin in the treatment of severe orbital
myiasis due to Cochliomyia hominivorax.
(2001) Ivermectin, an unconventional ago-
Theoria, Vol. 17 (2): 2008
nist of the glycine receptor chloride chan-
to care and treatment in developing coun-
nel. J. Biol. Chem. 276, 12556-12564.
selenium against carbon tetrachloride-in-
duced genotoxicity in ovine peripheral blood
avermectin-producing strain. Int. J.
lymphocytes. Mutat. Res. 494, 135-142.
Look at the History. www.extensionforestry.
facilitated immunity in onchocerciasis. Rever-
TIEMANN U (2008) In vivo and in vitro ef-
sal of lymphocytopenia, cellular anergy and
fects of the organochlorine pesticides DDT,
deficient cytokine production after single
treatment. Clin. Exp. Immunol. 89, 407-413.
female reproductive tract of mammals: a re-
ML (2002) Effect of dithiocarbamate pesti-
niños. Dermatol. Pediatric. Lat. 1, 61-65.
cide zineb and its commercial formulation
azzurro. III. Genotoxic evaluation on Chi-
nese hamster ovary (CHO) cells. Mutat. Res.
offspring of exposure of oocytes and embryos
to chemical and physical agents. Hum.
vents ethylene bis(dithiocarbamate) pesticide
Willoughby, Ohio: Meister Pro Information,
zineb-induced sister chromatid exchange in
Chinese hamster ovary cells. Mutagenesis 18,
ML (2008) Genotoxic and cytotoxic effects
hamster ovary (CHOK1) cells. Mutat. Res.
malian-cell toxicity of pesticides by structural
American Chemical Society, p. 89-113.
iron(II) in ferruginous smectite. Environ. Sci.
avermectin-like insecticidal agents.
Modulation of the genotoxicity of pesticides
reacted with redox-modified smectite clay.
and STOSSEL TP (1985) Effects of antioxi-
dants on oxidant-induced sister chromatid
Guelph, Ontario: University of Guelph.
STURCHIO JL (2001) The case of ivermectin:
lessons and implications for improving acces
molecular basis of its biosynthesis and regu-
Genotoxicidad y citotoxidad de pesticidas. Evaluación de los principios activos. / N. V. GONZÁLEZ ET AL.
lation. Appl. Microbiol. Biotechnol. 63, 626-
Identification of cytochrome P4503A4 as the
Y and LI J (2006) Construction of ivermectin
avermitilis. Appl. Microbiol. Biotechnol. 72,
Patienteninformation Dr. med. Freia Guse-Große Migräne Die Migräne ist eine ganz spezielle Form des Kopfschmerzes. Typisch sind anfallsweise auftreten-de, meist halbseitige Schmerzen, die häufig mehrere Stunden dauern. Wie kann es zu der Krankheit kommen? Die genaue Ursache ist nicht bekannt. Eine erbliche Veranlagung ist aber wahrscheinlich. Beeinflus-send kann ein Wetterumschlag
EURAX BT 901 19 ʺ Rack Versions Preferred non-Ex versionwith 2 grey terminal blocks top and Preferred Ex versionwith 1 blue terminal block at top for connecting intrinsically safe circuits and 1 grey terminal block at bottom for non-intrinsically safe circuits, for max. 2 ×171 screw terminals Technical data Application The rack corresponds to the guidelines in DIN 41 494, Part